La Notaria 15 responde a la necesidad imperante de toda ciudad de regenerar edificaciones obsoletas con un uso de suelo definido para crear nuevos espacios que revaloren el predio mismo así como atender las necesidades de la zona. Bajo esta premisa se logra descubrir la segunda vocación de una casa habitación y transformarla en oficinas, con la sensibilidad requerida para no demandar una demolición mayor, sino aprovechar el 80% de la estructura y transformar la edificación en áreas de trabajo funcionales.