Esta cocina en la población vizcaína de Galdakao, sobria, moderna y elegante no renuncia a elementos que la dan calidez y la hacen especial.
Para su concepción, se utilizó una paleta contrastada en blanco y marrón que siempre resulta elegante y atemporal.
El mobiliario, de Mobalco, se eligió en un diseño contemporáneo con cuarterones cuadrados en blanco que es un color que nunca pasa de moda. Para darle calidez y personalidad se eligió un fuerte contraste con el color chocolate que inunda tanto en el suelo (gres porcelánico de Porcelanosa imitando a madera) como en la encimera y el antepecho (Silestone Colección Zen Referencia Gedatsu) y en el papel pintado (Osborne & Little) que delimita la zona del comedor,
Se ha renunciado a revestir las paredes de azulejos ya que éstas o van pintadas, o cubiertas de Silestone o empapeladas.
La iluminación ha sido especialmente cuidada: focos halógenos enmarcando el lineal de los muebles y alojados en techos bajados siguiendo la ubicación del mobiliario; un punto de luz sobre la mesa; e iluminación con linestras bajo los armarios altos.
La zona de comedor se ha protegido y diferenciado con un zócalo de madera lacada en blanco hasta media altura.