Tu navegador no está actualizado.
Para tener una mejor experiencia con nuestro sitio, te recomendamos descargar otros navegadores gratuitos ¡Para eso, solo tienes que hacer click en el ícono!
Una colorida y fresca casa ubicada en el Yucatán es la que visitaremos en este libro de ideas. La casa tiene nombre propio: SH63 y es un diseño que integra elementos exteriores en el espacio interior por medio de colores, texturas y transparencias, creando así un carácter muy mexicano en lo que a arquitectura se refiere.
A lo largo de la casa hay jardines y patios que se entrelazan con los interiores, generando una vivienda llena de sorpresas y sensaciones y consiguiendo que todos los espacios se fusionen en uno sólo. Cada patio y cada jardín es un pequeño oasis de color y personalidad que enriquece el espacio interior. La residencia al completo es un estallido de color y una muestra de la arquitectura mexicana contemporánea.
Los diseñadores decidieron pintar de un intenso color rosa la fachada principal de la vivienda. Acompañada de un verde intenso en la vegetación la casa nos invita a cruzar la puerta y a descubrir sus interiores. Es discreta en sus formas pero a la vez es misteriosa. La forja de la puerta instalada en la valla representa un sol, el cual se presenta también en algunos espacios interiores.
El vestíbulo es un espacio amplio e iluminado en donde la claridad de la luz y colores neutros del cielo y muros permiten que brillen los nichos amarillos del librero y los patrones coloridos del diseño del pavimento. La armonía visual que se crea brinda una acogedora bienvenida, luminosa y cálida.
El área social comparte el espacio y se integra al llamado patio azul, el cual es un jardín ubicado al centro del edificio que funciona como conexión, iluminación natural y ventilación. Filtra además, los sonidos exteriores gracias a su fuente y su abundante vegetación.
Dentro del salón el mobiliario es blanco, igual que los muros y cielos, perfecto para reflejar la luz y no restar protagonismo a otros elementos: los detalles en azul como las sillas del comedor, el muro azul del jardín…
La cocina ha sido diseñada con una sinuosa forma en el centro, una isla de forma orgánica con cubierta de hormigón blanco y una más en color amarillo de la cual surge una tenue luz en color dorado. La carpintería es de color chocolate.
El baño es un hermoso espacio lleno de luz y perfecto para un momento de relajación. Cuenta con un espacio de vegetación bañado por la luz natural al fondo de la estancia. Los elementos decorativos, los detalles en la alfombra y los toalleros son de un intenso color rojo rompiendo así la hegemonía del blanco.
El dormitorio de invitados es un espacio sorprendente que se delimita con el patio azul. Sobre el suelo se ha colocado un tapete de pasta en color azul y café. El armario es un amplio muro de madera oscura que enmarca una pequeña estantería.
El color blanco en los muros y techos es una característica de esta vivienda. También el cemento de los suelos los estampados y colores de las alfombras y algunos textiles. La herrería en forma de sol reaparece en la intimidad de este dormitorio de matrimonio, sobresaliendo como elemento central e inspirador del diseño integral.
El sótano, originalmente utilizado como cisterna, ha cambiado por completo. Ahora el diseño es acogedor y muy especial. La iluminación es todo un acierto.
Desvelamos la última sorpresa de la casa, pero para ello debemos salir al exterior, a este patio de color rosa con jardín y ¡piscina! Es aquí en donde los inquilinos pasan la mayor parte del tiempo.
