Este depto, ubicado en Buenos Aires, sobresale por su interiorismo moderno y ambientes súper luminosos. El proyecto de la arquitecta Jazmín Zang integra piezas de diseño contemporáneo con objetos vintages. El resultado, ambientes elegantes y funcionales, con detalles súper originales. ¡Lo conocemos!
La estancia principal comparte un moderno living con un luminoso comedor. Las piezas de diseño, como parte del mobiliario, añaden estilo y crean una atmósfera moderna y elegante. La nobleza de la madera la vemos en el lustroso piso y algunos muebles como mesas y sillas.
La entrada de luz natural, a través de un balcón exterior, hace que el ambiente se vea más amplio y luminoso. Esa idea se refuerza con los colores claros de las paredes. Los contrastes los vemos en las pinceladas grises y notas negras de los tapizados y en el original diseño geométrico que viste una de las puertas. El diseño de iluminación integral es funcional y resalta cada detalle.
La zona del comedor se compone de un juego de mesa de cristal y sillas en madera con laca en blanco. Un espejo aporta el detalle formal y suma profundidad. En el techo una lámpara con focos led jerarquiza el área.
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Los detalles recaen en los objetos elegidos. Los cuadros que descansan sobre las repisa destacan la zona del living. Los contrastes entre colores claros y oscuros crean un ambiente sereno y elegante. Tres grandes aciertos: los objetos vintages, que se integran armoniosamente con el resto del mobiliario, la mesa del centro, de forma ovalada, que rompe con las líneas rectas de la mayoría de los muebles y la original lámpara que se ubica en uno de los extremos del sillón.
En una de las paredes un mueble modular con cajoneras y repisas funciona como biblioteca. Diseñado en madera y mdf es una buena idea para organizar y aprovechar al máximo los muros.
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El dormitorio es súper luminoso y muy cómodo. De generoso metraje cuenta con los accesorios que no puedan faltar en una habitación como alfombras, almohadones, sillones y mesas de apoyo. La gama de colores se inclina por los tonos obscuros y cálidos, los cuales contrastan con el color blanco de los muros y el brillo y la calidez de la madera.
Finalmente un pequeño balcón se convierte en un rinconcito funcional ideal para descansar. Equipado con dos sillas de estilo Acapulco y algunos objetos de decoración se crea un pequeño espacio de reunión. La nota natural está dada por un atractivo jardín vertical.